1.- Elige un poema
de la Antología (dispones de todos los poemas en el moodle de la materia)
perteneciente al Renacimiento o al Barroco y comenta los rasgos mitológicos que
observes (personajes, paisajes, actitudes, enseñanzas, descripciones...).
"¡Ah de la vida!"...
¿Nadie me responde?
¡Aquí de
los antaños que he vivido!
La Fortuna
mis tiempos ha mordido;
las Horas
mi locura las esconde.
¡Que sin
poder saber cómo ni a dónde
la salud y
la edad se hayan huido!
Falta la
vida, asiste lo vivido,
y no hay
calamidad que no me ronde.
Ayer se
fue; mañana no ha llegado;
hoy se
está yendo sin parar un punto:
soy un
fue, y un será, y un es cansado.
En el hoy
y mañana y ayer, junto
pañales y
mortaja, y he quedado
presentes
sucesiones de difunto.
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Este poema pertenece
al barroco y lo podemos llegar a encontrar en un libro recopilatorio llamado: “El
Parmaso español y musas castellanas” de 1964, en ambas se encuentran más de 800
composiciones donde la mayoría constan de sonetos, por lo tanto incluye dos
cuartetos y dos tercetos. Francisco de Quevedo fue el escritor del poema.
Podemos observar que el poema es de
género lírico, donde el autor nos intenta expresar inquietud por el paso del
tiempo y la proximidad que se observa hacia la muerte. El autor se da cuenta que
ha envejecido muy rápidamente porque el tiempo pasa tan rápido que cuando menos
te lo esperas ya estás al borde de la muerte. Ni siquiera se dio cuenta de que
poco la salud le estaba abandonando. Si nos lo paramos a pensar no hay tanta
diferencia entre el pasado, el presente
y el futuro, sino que según pasan los días lo presente ya ha pasado y tu futuro
aquello que ves tan lejano, no lo es porque está prácticamente al borde como la
muerte.
Cuando el autor nos habla sobre lo rápido
que se le ha pasado el tiempo por lo tanto la poca vida que cree haber vivido,
hablamos de un tópico literario muy común en la época en la que se escribe
llamado: “tempus fugit”, que significa: “la fugacidad de la vida”. Este tópico lo
podemos observar claramente en el titulo de la del poema: “Represéntase la
brevedad de lo que se vive y cuán nada parece lo que se vivió”.
Ya que sabemos que la mitología es
un conjunto de mitos o historias que narran las acciones de los dioses y los
héroes de la Antigüedad, pertenecen a la historia, la cultura y la religión de
un pueblo. Podemos decir que uno de los rasgos mitológicos que se encuentra es
el hilo que hay entre la vida y la muerte. El autor de este poema muestra el
tiempo y la fortuna que se encuentra en la vida de uno mismo, pero él nos la está
mostrando por el lado malo.
2.- Añade la imagen de un cuadro que hayas conocido en el Prado que
también contenga rasgos mitológicos.
Este cuadro llamado “La maja desnuda” fue
pintado por Francisco de Goya y Lucientes. Es una obra de encargo pintada antes
de 1980 y fue una de las obras más célebres de estos dos artistas. En la
pintura observamos a una hermosa mujer recostada en un lecho y mirado al
observador. El desnudo se trata de una mujer real no mitológica, en su época se
le llamo “la Gitana”. Se dice que el rostro de esta hermosa mujer pueda
pertenecer a la duquesa de Alba.
3.- Realiza una comparación entre tus dos elecciones: comenta
las semejanzas, las diferencias, di a qué se deben (a la época, al punto de
vista...). Ten en cuenta que deberás documentarte sobre el autor del poema,
sobre el pintor, sobre la época en que ambos fueron creados, etc.
Podemos
observar que el poema pertenece al Barroco y que el cuadro al Neoclasicismo,
por lo tanto pertenecen a épocas distintas. En el poema el autor nos intenta expresar inquietud por el paso del tiempo
y la proximidad que se observa hacia la muerte, pero en el caso del cuadro el
pintor quiere darnos a conocer el hermoso cuerpo de una mujer real, sin mitología
pero de una forma distinta en la que podemos observar que se expresa
espectacularmente el erotismo. Todo esto significa que entre el poema de Francisco
de Quevedo y la pintura de Francisco de Goya, no hay ninguna semejanza sino que
todo son diferencias.
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