Para
empezar, vamos a hablar del poema titulado Álamo
blanco, de Juan Ramón Jiménez, un autor del siglo XIX, dentro de la
Generación del 14, un período literario que abarcaba autores nacidos en fechas
próximas, presentaban características comunes a la hora de realizar sus obras y
pasó un hecho histórico, en este caso, la Primera Guerra Mundial que los hizo
variar en el momento de escribir. Pero, Juan Ramón no siempre siguió las
tendencias de esa generación. El escritor onubense vivió diferentes etapas en
su vida que influenciaron mucho sus poesías. La primera fue la sensitiva, una etapa donde sus obras
presentaban rasgos modernistas y abundaba la felicidad; y es la que veremos reflejada a continuación. Este poema podemos encontrarlo en
la antología poética del mismo autor.
Para
continuar, el tema de este poema es el contacto de la naturaleza con el autor,
la tranquilidad que se respira al leerlo, nos sitúa como si estuviésemos justo
al lado de ése álamo blanco, donde arriba canta el pájaro y abajo canta el
agua. Juan Ramón, en este poema nos quiere explicar que arriba del álamo blanco
están los pájaros cantando, y abajo está el agua, de la cual oímos como corre,
y entre esas distancias, entre ese arriba
y abajo, encontramos al autor, a su alma. Entre esas dos melodías dice, es
decir entre el cantar de los pájaros y el sonido del agua al correr, se
encuentra una columna de plata, con la cual quiere referirse a una cascada. Entonces
nos sitúa elementos naturales del mismo modo que nos sitúa los pájaros arriba y
el agua abajo. Lo hace de la siguiente manera: primero, las hojas, los pájaros
y las estrellas, que estarían situadas arriba, y, después, con un punto y coma
nos separa los anteriores elementos con las flores bajas, las raíces y el agua,
que nos las sitúa donde estaría el agua. Y, otra vez, entre ese arriba y abajo, tenemos la columna de
plata. Y el tronco ideal, es decir, el álamo
blanco, entre su alma y su alma. Para acabar, nos sitúa la estrella en el trino
(lugar de dioses), y la onda abajo en el agua. Y otra vez, arriba y abajo, le tiembla el alma.
En el nivel
formal, Álamo blanco, pertenece al género
lírico, ya que es aquella forma de escribir que pretende expresar los
sentimientos, los pensamientos y en ciertos casos la imaginación. Dentro del género
lírico, distinguimos varias categorías con las cuales podemos hacer una mejor
clasificación, y este poema, desde mi punto de vista personal, sería
simplemente una poesía, ya que se expresa la belleza por medio de la palabra en
forma de versos. Respeto al lenguaje, no estaríamos equivocados a decir que
este poema emplea un lenguaje bastante coloquial, ya que es bien sencillo y
entendedor; hay alguna palabra que otra, como mecer y trino, que quizás
es más culta, pero en lo general, el lenguaje no debe ser ningún impedimento a
la hora de comprender el poema. Álamo blanco es una poesía donde escasean los
verbos, y todos ellos están conjugados en presente de indicativo, como canta,
baja y mece. Los signos de puntuación, nos ayudan a una fácil interpretación y,
a más, este poema es un tanto peculiar en este aspecto porque cuando el autor
va a hablar de su alma, de él mismo, cuando no está describiendo paisaje,
siempre lo hace entre paréntesis; y, siempre que menciona a la columna de
plata, lo hace entre símbolos de exclamación. Como vamos a ver a continuación:
(Arriba y abajo,
se me abre el alma)
¡Entre dos
melodías,
la columna de plata!
¡Entre dos
conmociones,
la columna de plata!
(¡Y tú, tronco
ideal,
entre mi alma y mi alma!)
(Abajo y arriba,
me tiembla el alma)
Los ejemplos
anteriores pertenecen a los versos 3-4, 5-6, 9-10, 11-12 y 15-16.
Para
continuar con el nivel formal, vamos a mirar algunas de las figuras retóricas
que encontramos en el poema de Juan Ramón. Tanto en los versos 5-6, como 9-10 y
11-12, encontramos exclamaciones, como podemos ver seguidamente:
¡Entre dos
conmociones,
la columna de
plata!
¡Entre dos
conmociones,
la columna de
plata!
(¡Y tú, tronco ideal,
entre mi alma y mi alma!)
También
encontramos una metáfora siempre que nos habla de la columna de plata, ya que
con columna de plata quiere referirse a cascada. Podemos encontrarlo en los
versos 5-6 y 9-10, como vemos a continuación:
¡Entre dos melodías,
la columna de plata!
¡Entre dos conmociones,
la columna de plata!
Encontramos una
antítesis o contraste siempre que nos menciona el famoso arriba y abajo de este poema, ya que enfrentamos conceptos
contrarios. Lo vemos en los versos 1-2, 3-4, 15-16:
Arriba canta el pájaro
y abajo
canta el agua.
(Arriba y abajo,
se me abre el alma).
(Abajo y arriba,
me tiembla el
alma).
La personificación también está presente en este
poema, ya que siempre que se habla del alma, se le atribuye una cualidad de
humanos. Podemos observarlo en los versos escritos a continuación, que
pertenecen a los números 3-4 y 15-16.
(Arriba y abajo,
se me abre
el alma).
(Abajo y arriba,
me tiembla el alma).
Hablando de la
estructura métrica, este poema está compuesto por versos, mayoritariamente heptasílabos
con una rima asonante, (A-B-A-B), por lo cual, no es de extrañar la musicalidad
que tiene. Tiene 16 versos, estructurados en 8 estrofas (cada una de ellas
compuesta por dos versos).
Para concluir, me
gustaría relacionar este poema con los rasgos característicos que tiene. En
primer lugar, vemos que incluye rasgos modernistas, ya que por ejemplo, nos
describe la naturaleza, pero con cierta subjetividad; el lenguaje es sencillo y
busca la perfección; se representan los sentidos, como el sonido de los pájaros,
el correr del agua, el olor del álamo; las exclamaciones están presentes y los
sentimientos del alma también; en resumen, esté poema está hecho para reafirmar
el lema de los modernistas: arte por arte.
Como que no presenta ninguna característica de la Generación del 14, no estaríamos
equivocados al decir que este poema pertenece a la etapa sensitiva de Juan Ramón.
Ésta es una imagen de Juan Ramón Jiménez hacia el año 1900. He escogido esta porque me parece que debería ser bastante próxima a cuando escribió el poema del Álamo Blanco.
La imagen ha sido extraída de la fuente de información proporcionada por la profesora (bib.cervantesvirtual.com) y la información que he necesitado para escribir mi comentario de texto, la he obtenido mirando nuestro libro digital de weeras y con los apuntes dados en clase. Respeto a las figuras retóricas, he consultado los documentos pdf colgados en nuestro blog.
1 comentario:
Lo comentamos en clase. Nota: 9
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